A solo 10 minutos del campo, Huesca es una ciudad perfecta para una escapada urbana.
Recorre su casco histórico, con joyas como la catedral gótica, el Monasterio de San Pedro el Viejo o el Museo de Huesca.
Si prefieres algo más relajado, piérdete por sus plazas, haz algunas compras o disfruta del ambiente local con unas tapas por las calles que hay entre los Porches de Galicia y la iglesia de San Lorenzo.
Es una ciudad tranquila, acogedora y con mucho sabor.